martes, 15 de enero de 2013

“Me da vergüenza decir que soy policía”

Por E. Ferrer y P. Beltrami

La sargento Teresa Tissera relató la trama de irregularidades que gira alrededor de la muerte de su hermano. El domingo por la mañana, la policía de Gral. Madariaga detuvo a Damián Sepúlveda, quien se habría suicidado en su celda ese mismo día. La familia aún no tuvo acceso al cuerpo.

“Me da vergüenza decir que soy policía”, dijo la sargento Teresa Tissera, quien señaló a la policía de la ciudad de Gral. Madariaga como responsables por la muerte de su hermano, Damián Sepúlveda, ocurrida el pasado domingo 13.

En diálogo con Dixit, FM Residencias 96.5, Tissera relató que su hermano salió a las 6.45 de la mañana del domingo de la casa de su padre. Poco después, y aunque no portaba documento de identidad, Damián fue detenido por haber cometido “disturbios” en la vía pública. Al atardecer, la policía le informó a la familia que Damián se había ahorcado con su remera en una celda de la comisaría de la ciudad, donde habría pasado la mayor parte de la jornada.

Frente a ello, Tissera afirmó que los efectivos realizaron numerosas “irregularidades” desde la detención de Sepúlveda, de 27 años. “Pedí ver el libro de guardia, donde tiene que estar asentado el ingreso de mi hermano a la comisaría; los nombres de los oficiales que lo arrestaron; el domicilio donde lo detuvieron; qué fue lo que pasó; y el acta de procedimiento. Pero, lo único que me dijeron fue ‘Todo está en la Fiscalía’”, sostuvo la sargento. Además, la sargento desconfía de la versión del suicidio y, sobre todo, la manera en la que ocurrió: “Mi hermano pesaba 90 kilos, ¿cómo te colgás de una reja con una remera?”.

En tanto, Tissera denunció que la familia aún no tuvo acceso al cuerpo de su hermano. En principio, hubo distintas versiones sobre el paradero del mismo, debido a que les notificaron que el cadáver podía estar en Pinamar o en Lomas de Zamora. “Quiero que me den el cuerpo de mi hermano, se merece una sepultura digna”, reclamó.

Por último, Tissera contó que, cuando buscaban explicaciones sobre el caso, ella y el padre de su hermano fueron maltratados por los efectivos policiales que los atendieron en la comisaría. “Las personas que le hicieron esto a Damián no merecen formar parte de la institución”, reflexionó la agente de la Policía Bonaerense. Igualmente, la sargento se comprometió a llegar hasta el final para que el caso se esclarezca: “Quiero saber la verdad”, sentenció.

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